23 ago 2008

Cartas de lectores - LA NACIÓN, 23/08/08

Conocimiento del agro

Señor Director:
"Hace un tiempo escuché a la Presidenta afirmar muy livianamente cuánto sabe del campo (vacas, trigo, soja). Me sentí profundamente dolida e indignada, ya que dediqué muchos años de mi vida a estudiar sobre ésos y otros temas agropecuarios y no me siento capaz de efectuar una aseveración semejante. Cualquier persona inteligente sabe que no sabe de algo, sino que está en el camino del aprendizaje; que no se es experto ni conocedor, sino estudioso.
"Creo que tales dichos revelan no sólo falacia sino fatuidad, soberbia e ignorancia. Me pregunto si la Presidenta sabe lo suficiente de su profesión, ya que a veces parece desconocer lo más básico: la Constitución nacional.
"Es lastimosa esta situación, cuando el país necesita con urgencia ser gobernado por una persona lúcida, con sentido común, humilde, sensible y de verdadera humanidad."

Susana O. Puricelli
Ing. agrónoma H. Cortés 2325
Hurlingham (Bs. As.)


Scioli

Señor Director:
"Algunos gobernadores se vuelven lacayos del poder central por temor a no recibir en tiempo la coparticipación federal correspondiente, y ello constituye un error. Si se denunciara este proceder a los medios, la recibirían en el momento oportuno y en su totalidad y no retaceada como es ahora.
"El gobernador Scioli, a quien en su momento yo consideraba presidenciable, perdió el tren de la historia; ya demostró falta de carácter y con tal de hacer buena letra se ha constituido en un amanuense de la dinastía K reinante. Se olvida de que cuando era vicepresidente, Cristina lo humilló diciéndole que desconocía los reglamentos del Congreso, pero parece que Scioli se olvidó y no hay acto en que no esté a su lado y resalte sus virtudes."

Ing. Pablo C. Pera
DNI 4.217.244


Ciclistas olímpicos

Señor Director:
"La humildad, el esfuerzo, el sacrificio y el apoyo mutuo permitieron ganar la primera medalla de oro en estos Juegos Olímpicos. Estos son los «laureles que supieron conseguir» los ciclistas Curuchet y Pérez para su patria. ¡Bien por ellos! Una lección para todos los argentinos."

Carlota Ezcurra de Del Campo
carlotaezcurra@hotmail.com


Oligarca

Señor Director:
"El 9/1/75, en época de un gobierno democrático, ingresé a Chrysler Fevre Argentina como gerente de Finanzas. Ese día, el director Eduardo Beach me dio la bienvenida y me dijo que estaban todos amenazados por Montoneros y el ERP, porque la empresa no aceptaba pagarles una mensualidad, y que si yo desistía de ingresar no lo tomaría como una cobardía. Ante mi respuesta de que deseaba entrar, me preguntó mi fecha de nacimiento, la escribió en una tarjeta y al dorso, su nombre y el del abogado de la empresa y sus teléfonos. Dijo que si me secuestraban, la empresa se haría cargo. Gran debut.
"En marzo del 76, al llegar a la empresa, veo un tumulto. Habían asesinado a Eduardo Kenny, gerente de Distribución. En julio, asesinaron a Carlos Balsa, supervisor de Flota, y en noviembre, a Jorge Souto, gerente de Control de Laboratorio. A partir de allí, me obligaron a salir de casa con custodia.
"Mi madre les contaba a sus clientas del negocio de composturas de zapatos qué había sido de mi padre zapatero (de allí mi origen oligarca), que de noche no podía dormir pensando que en cualquier momento le iban a informar que a su hijo lo había asesinado el terrorismo.
"Sus clientas me sugerían cambiar de trabajo. Pregunto: ¿cuándo van a ir a los tribunales acusados de crímenes de lesa humanidad quienes enviaban a los jovencitos «idealistas» a asesinar a civiles y a la vez a ser eliminados por las fuerzas del orden? Los nombres los conocemos: Bonasso, Kunkel, Taiana, Verbitszky, Eduardo Luis Duhalde, abogado de los terroristas... y sigue la lista.
"Mi pecado para estar en la lista de candidatos a ser asesinados fue que, cuando falleció mi padre, yo, de 16 años, en lugar de ponerme a llorar, agarrar un arma y salir a robar, busqué un trabajo, terminé mi secundaria en la Escuela Carlos Pellegrini, mis estudios, en la Asociación Argentina de Cultura Inglesa y en la Facultad de Ciencias Económicas, donde me recibí de contador público, licenciado en Administración y en Economía, mientras ayudaba a mi madre en su negocio.
"Si hubiera salido a la calle con un fierro, quizás ahora podría ser ministro, secretario de Estado o jefe de fiscales."

Dr. José Brunetta
brunetta@byperformance.com.ar