LA PATRIA "RECOBRADA"
Cristina Fernández resolvió celebrar la fecha patria del 25 de mayo desde un atril en San Carlos de Bariloche. Los argentinos esperábamos que nos recordara las jornadas previas a esa fecha gloriosa, el primer grito de libertad, y a aquellos hombres que convocaron el Cabildo Abierto y que luego conformaron el primer gobierno patrio.
Sorpresa. Cristina se dirigió al público reunido en el teatro La Baita de esa ciudad patagónica para informarnos que la República Argentina fue fundada por Néstor Kirchner en 2003 -algo que ya había hecho el año pasado en Resistencia en compañía del gobernador del Chaco, Jorge Capitanich-, y que ella y su marido nos han devuelto la Patria que nos habían arrebatado.
Como presidente de la Nación debió encabezar el tedeum en la catedral porteña, pero tanto Cristina como Néstor siempre buscaron otros obispos más amables que el cardenal Jorge Bergoglio, que se ha mostrado habitualmente crítico a las graves fallas de la administración kirchnerista. Bergoglio las señaló también esta vez, a pesar de la ausencia de la primera magistrada.
El resto del discurso de Cristina consistió en autoalabanzas a su gestión y a la precedente de su fallecido compañero en la vida, que “con mucha humildad y mucha vocación de servicio a la patria” se dedicó a hacer realidad un proyecto, sin medir las consecuencias. Como de costumbre, dirigió los habituales “palos” a Clarín, a los periodistas díscolos y a todo aquel que no esté de acuerdo con el modelo.
Párrafo aparte merece la clase de historia sobre Angola, inexplicablemente incluida en una fecha patria nacional. Ésa fue la segunda sorpresa: que ambos países, Argentina y Angola se pueden enlazar históricamente en la gesta libertadora de América, ya que muchos integrantes de los ejércitos de aquella época eran de origen angoleño. Impactante novedad, aunque en realidad trató de justificar una vez más lo que a todas luces resulta un hecho delirante: el comercio bilateral sin trabas con ese país africano, mientras se cierran las puertas a mercados tradicionales, incluyendo los de la región, mucho más cercanos e interesantes.
Lo cierto es que si no fuera por el matrimonio Kirchner el país no existiría como tal, y que les debemos a ambos, a través de sus respectivas gestiones de gobierno, el orden, el progreso, la paz social, y los magníficos estándares científicos y de salud y educación que hoy experimentamos los argentinos. Todo gracias a esta patria nacida el 25 de mayo de 2003 y “recobrada” para siempre por Cristina y Néstor, para disfrute de los 40 millones de compatriotas.
© Raquel E. Consigli y Horacio Martínez Paz